Existen muchas razones para preferir el café orgánico al café convencional. El café ecológico es cultivado sin usar abonos químicos, plaguicidas ni herbicidas. Eso hace de él un café más saludable que el convencional.
El componente medioambiental es también de importancia al momento de juzgar las cualidades del café orgánico. Al dejar de usar métodos nocivos para el medio ambiente se está contribuyendo a disminuir la carga contaminante ocasionada por la agricultura.
No olvidemos que el café es para muchas personas un producto de índole cotidiano, así que un cambio de mentalidad en cuanto al café que se consume en una buena porción de la población mundial traería grandes beneficios al ecosistema global.
Muchos de los cafés orgánicos son a la vez cafés comercializados con prácticas de comercio justo.
El cultivo del café es intensivo en mano de obra. Comprar café orgánico comercializado justamente significa apoyar a familias que invierten mucho trabajo en la producción agrícola. En la mayoría de los casos se trata de campesinos de escasos recursos que merecen un pago más digno que el que ofrecen los mercados de café convencional.
La siembra y cultivo de café orgánico, tiene enormes beneficios tanto para la preservación del medio ambiente, como para la conservación de la salud.
Las propiedades del café orgánico no difieren de los beneficios para la salud del café convencional. En particular, se destacan sus efectos estimulantes del sistema nervioso central, además de su alto contenido en antioxidantes que podrían retrasar el proceso de envejecimiento.
Por otra parte, se han estudiado sus propiedades medicinales en la inhibición del avance de enfermedades como la diabetes, el mal de Parkinson, el mal de Alzheimer y la cirrosis hepática. Sin embargo, por contener cafeína en su composición, su consumo no debe se abusivo y pueden existir circunstancias, en las que esté totalmente contraindicado o restringido su uso. Tal es el caso, de los pacientes con hipertensión arterial, niños pequeños, y mujeres embarazadas, que al igual de lo que ocurre con otro tipo de alcaloides, no deben excederse en su consumo.